Te crees estar en otros tiempos debido a que es un restaurante familiar y poco ha cambiado desde que abrió en su época. En cambio la cocina conserva el buen gusto mezclado con tradición y frescura.
Una sala mediana te recibe con respeto y te ofrece una comida cuidada. Destacar los arroces y los buenos vinos.
El precio por comensal ronda los 25€, que se pagan sin dudarlo cuando has comido a gusto y sin faltarte de nada.
¿Es necesario lo moderno alrededor nuestro continuamente? Pues para comer bien... creo que no.
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